¡SERENDIPIAS!
El contexto bélico de la Primera Guerra Mundial fue el que albergó el nacimiento de la toalla sanitaria, cuando las enfermeras de la Cruz Roja, que empleaban un nuevo material absorbente para el vendaje de los heridos, implementaron su uso como toallas absorbentes en su periodo menstrual.
El relato inicia con la visita del responsable de investigación de la incipiente compañía Kimberly-Clark, Ernst Mahler, y su vicepresidente, James C. Kimberly, a algunas plantas productoras de pasta de papel en Alemania, Austria y Escandinavia en 1914. Año en que, a su regreso a EE.UU. e inspirados en los materiales observados, inventaron un material de bajo costo de producción y alta absorbencia: el celucotton.
El invento fue comercializado con éxito gracias al ingreso de EE.UU. a la guerra en 1917, ya que fue ampliamente vendido al ejército y a la Cruz Roja como forro de los uniformes del personal sanitario y como material de curación. Ahí, fue cuando las enfermeras de la Cruz Roja incorporaron su nuevo uso, efectivo y popularizado en el campo de batalla pero aprovechado comercialmente hasta tres años después.
El término de la guerra limitó las ventas de Kimberly-Clark, sin embargo, aprovechó la nueva aplicación informal dada a su celucotton e inició su estudio práctico y comercial, no sin antes readquirir el material no usado durante el conflicto bélico. De esta forma, en 1920, la compañía lanzó su primera toalla sanitaria, confeccionada a mano con su material y gasas, al que llamó Kotex (abreviación de cotton-texture).
¡Serendipia! Relación páncreas-diabetes
Responsable de la regulación de los niveles de glucosa en la sangre, al almacenarla en las células para su aprovechamiento energético, la insulina es una hormona empleada en el tratamiento de la diabetes. Hoy en día, su administración ha sido popularizada mejorando la calidad de vida de los pacientes diabéticos, sin embargo, antes de 1923 la única indicación para su tratamiento era la ingesta de una dieta baja en azúcares.