Ciencia ciudadana: perspectiva clave de la sismología

Fenómenos naturales como los sismos encuentran su importancia en el impacto que provocan sobre el ser humano, de ahí que su percepción cobre relevancia. Si bien la medición de los sismos es realizada por expertos a través de instrumentos científicos, la sensación y daño reportados por la población proporcionan datos cualitativos que complementan las mediciones cuantitativas en materia sismológica.

Llamada «ciencia ciudadana», la implicación activa del público no especializado en proyectos de investigación científica es fundamental en el estudio de los sismos en el planeta; una posibilidad concretada gracias al alcance, cada día mayor, del Internet.

Dicha ciencia ciudadana es la que ha permitido el desarrollo de plataformas internacionales de estudio como Did you feel it?; un sistema automático administrado por el United States Geological Survey (USGS), que recopila información de personas que sintieron un sismo (intensidad macrosísmica) para generar mapas de intensidad después de su ocurrencia.

Creado en 1999 por los sismólogos Vincent Quitoriano y David Wald, bajo el auspicio de la USGS, Did you feel it? ha recopilado -en sus primeros 15 años de alcance internacional- más de cinco millones de informes individuales de ciudadanos sobre sobre la experiencia, efectos y magnitud de los daños causados por los sismos.

Para reportar un sismo, el usuario debe ingresar a la página Did You Feel It? (usgs.gov), en donde habrá de completar un cuestionario sobre su experiencia. Lo anterior puede realizarlo inmediatamente después de la percepción de un sismo o cuando le sea posible hacerlo. Cabe señalar que los productos generados por la plataforma son actualizados cada cinco minutos a partir de la ocurrencia de un evento, disminuyendo su frecuencia en función de la recepción de nuevos datos; así, aquellos que no reciban informe alguno al paso de una hora, serán eliminados.

La inmediatez del Internet permite recopilar datos en cantidades que posibilitan la elaboración casi instantánea de mapas de intensidad macrosísmica de alta calidad. De esta manera, todos aquellos sismos de magnitud 1.9 o mayor, detectados por el Advanced National Seismic System (ANSS) de los EE.UU., son reportados en la plataforma para recibir las percepciones de la población.

Si el usuario actúa más rápido que el reporte de la ANSS, la plataforma le permite completar el cuestionario, aunque el evento aún no esté registrado. Así, cada evento significativo o percibido genera una serie de productos, abiertos a la población en general y empleados por otras aplicaciones científicas como USGS Shakemap.

Algunos de los productos generados, disponibles en diversos formatos, son: un mapa de intensidad macrosísmica, un gráfico comparativo entre intensidad y distancia, un gráfico comparativo entre respuestas ciudadanas y el tiempo en que fueron recibidas, una tabla de respuestas recibidas y un catálogo de sismos. Este último, de fácil consulta con información sobre magnitud, fecha, horario, región geográfica y otras opciones avanzadas como coordenadas, profundidad, brecha azimutal, tipo de evento, impacto, entre otras.

Además de la USGS, organismos científicos en el mundo emplean los datos generados por la plataforma, en específico, para realizar comparaciones con los mapas nacionales de peligro sísmico en diversos países.

Producto de interés es el visor de datos anual que, a través de un mapa interactivo, permite observar la respuesta ciudadana a los eventos ocurridos durante un año en los EE.UU. y en el mundo.

Medir un sismo con instrumentos científicos supone un reto de precisión analítica, así actualmente la magnitud de un evento (tamaño de un sismo) es determinada mediante la medición de la «magnitud de momento”, es decir, de la energía liberada por un sismo. Ahora bien, a decir la propia plataforma, «la intensidad es una medida cualitativa de la fuerza del temblor del suelo en un sitio particular», para la que la percepción ciudadana es la principal fuente de datos.

El rigor académico de esta medida es garantizado mediante el empleo de la «escala de Mercalli modificada», la cual califica la fuerza de un sismo a través de números romanos, yendo de I (no sentido) a X (extremo).

Conjuntar las percepciones de los usuarios no es tarea sencilla y el procesamiento de los datos generados tampoco lo es. Por ello, Did you feel it? ha desarrollado una metodología en la que agrega todas las respuestas ciudadanas a cada comunidad -delimitada por códigos postales, ciudades o cajas rectangulares definidas por límites del Sistema de Coordinades Universal de Mercator (UTM)-

A esta agrupación de respuestas en una comunidad le es asignada una intensidad, llamada «intensidad decimal de la comunidad» (CDI), la cual no es un promedio sino una sumatoria de los valores definidos (rango y peso específico) para cada una de las ocho variables con las que trabaja la plataforma y que son: ¿Lo sentiste?, ¿cómo describirías el temblor?, ¿cómo reaccionaste?, ¿te resultó difícil pararte o caminar?, ¿los objetos traquetearon, se movieron o se cayeron los estantes?, ¿los cuadros se movieron o quedaron torcidos?, ¿los muebles se deslizaron, cayeron o desplazaron?, ¿hubo daños en el edificio?

Todo aquel ciudadano del mundo que desee formar parte de este proyecto, puede hacerlo incluso si no percibió un evento sísmico registrado y es que, la respuesta negativa también es útil a la plataforma en términos de impacto y sensación del movimiento.